LAS MARICAS DE LA RED

NO SON COMO NOSOTRXS

Porque puedo y porque me da la  gana

 

Reconozcámoslo; todxs alguna vez hemos sentido que La Red del canal Caracol, como decimos los costeños, se pasa de piña. Un programa desnutrido de material de calidad, que exhibe uno de los perfiles más odiados por las maricas que hemos luchado por salir del cliché de “la chismosa del barrio”. Porque aunque nos encanta el chisme como a cualquier cacorro, mujer cisgénero, ama de casa o machorra estándar, en este platanal si no se dejan las cuentas bien claras y el chocolate bien espeso, sin que nos demos cuenta, las maricas terminamos con otro cliché encima.

El programa en cuestión es un chismógrafo que wikipedia describe como un programa de entretenimiento y farándula en donde se les cuenta a los colombianos las últimas noticias del género; que su primera emisión fue el 26 de noviembre del 2011 y que desde ese momento logró altos índices de audiencia, “gracias a su formato innovador y a sus novedosas secciones” -una vaina así súper escueta que en nada advierte que en realidad se trata de un programa de chismes y exhibición de la vida privada de “famosos” de la televisión y la radio- Un remake anfibio entre El Lavadero y Sweet el dulce sabor del chisme. Aunque se esfuercen por darle ese toque de Fashion Police sabiendo que no llegan a Ventaneando con Patty Chapoy, seamos serios y serias.

Han ocurrido varios cambios en el personal del programa pero la constante ha sido la presencia de afamados y bastante amanerados hombres de la farándula criolla colombiana: Carlos Giraldo, Juan Carlos Giraldo, Frank Solano y Ronald Mayorga quien ya salió del programa y hoy tiene un perfil distinto en las redes sociales. En un espectro distinto, a mi parecer, está Mary Méndez.

Una de las cosas que me llama la atención del programa es la frecuencia y la duración que ha ido obteniendo a lo lardo de los últimos años en la parrilla de televisión de uno de los canales más importantes del país: 150 largos, jugosos y costosos minutos en el espectro televisivo colombiano.

Maricas costeñas, vallecaucanas, cachacas y demás gritan cada fin de semana para intentarnos convencer de que lo que le ocurre a Jessie Uribe realmente es relevante y nos importa. Sin embargo no deja de ser destacable que la mayoría de las voces sean amariconadas y bastante obvias frente a su sexualidad. Mary Méndez, por su parte, siempre ha sabido sortear su presciencia entre las lenguas viperinas de sus compañerxs de set.

Aunque el tono gomelito de Carlos Vargas nos dispare los pistones, sigue teniendo por completo mi atención el nivel de tolerancia con el que la población colombiana recibe la información más comemierda que ocurre en el país, de boca de maricas tan partidas. Cada chisme que se cuenta en ese programa escribe una línea más en el libro de la memoria de lxs colombianxs, y vaya uno a saber qué carajos andarán entendiendo esas mentes intoxicadas de series enlatadas de televisión, donde la fórmula consiste fundamentalmente en contratar modelos a actuar semiencueros en narco novelas con diálogos que casi no logran memorizar… o en su defecto Elif.

.. o padres e hijos. ¿Me hago entender?


Me refiero a lo que se andarán armando esos televidentes miopes en sus cabezas en relación a las personas sexualmente diversas, o por lo menos a una parte de ellas, mientras, de soslayo, invisibilizan otras. Las otras maricas Otras… si, así como lo leen miopes…OtrasMaricasOtras

Sorprende ver a las madres homofóbicas, lesbofóbicas y transfóbicas reír a carcajadas con los comentarios de fina coquetería guajirocachacas de Frank Solano

Y no queda otra cosa que empezar a hacernos las preguntas pertinentes acerca de los contenidos, la frecuencia y el público hacia el que está siendo dirigida la televisión colombiana en una de las franjas más sensibles y amalgamantes de realidades sociales; colocarles el tamiz de género, clase, raza y diversidad sexual, porque ni crean que la gente inteligente se va a comer el cuento de que todxs consumimos los medios con las mismas expectativas.

Según las conclusiones de la investigación hecha por la comunicadora social y periodista Carolina Ramírez Rojas titulada la estrategia de targeting utilizada por caracol televisión para el diseño y creación de sus productos televisivos: el targeting del canal caracol, se basa en las mujeres amas de casa, o trabajadoras que tiene un comportamiento psicológico de mujeres independientes, trabajadoras y con un alto autoestima, estas mujeres proyectan seguridad en sus decisiones y desean compartir su vida con sus hijos.

Los medios de comunicación y en especial la televisión, son la mayor caja de resonancia de transmisión de códigos y metarrelatos que, en este caso, está dejando a las maricas paradas en dos espectros posibles: locas gritonas de clase alta educada y con acceso a los medios y al poder que eso trae consigo adherido, versus TODXS las demás.

Las estrategias que Caracol implementa para la creación de productos y/o contenidos que se emiten en una franja tiene una razón de ser, pues cada franja esta compuesta por un target diferente, pero igual se tiene latente, que el porcentaje de personas que más ve televisión son mujeres de 35 a 40 años de edad (Ramirez, 2008) eso quiere decir que a las madres de familia en un alto porcentaje les toca soportar todas las tardes, un contenido flojo que les llena la cabeza de información vacía. Popó. Fundamentalmente.

Aunque suene tajante, tocará enfrentar la realidad de una ciudad que se debate entre la desigualdad, el analfabetismo estructural, académico y político con el que improvisan a diario miles de personas; entre el Pozón y La Boquilla. Hambre, miseria, embarazos adolecentes, delincuencia y sobretodo, un florecimiento reverberante de la iglesia evangélica que ya filósofos contemporáneos han empezado a poner en la lupa de sus investigaciones en relación a los interés políticos de USA sobre Latino américa. Una faceta colonial de la que Fanon se burlaría a carcajadas mientras una lágrima le descendería de su ojo derecho. Una vergüenza total.

Me refiero a los cientos de maricas, testimonio vivo de historias inimaginables de violencia familiar en esta historia que ya no se puede borrar. Madres que el tiempo volvió prematuramente abuelas de sus otros hijxs; las normales, mientras rechazaban tajante y categóricamente, amparadas en la verborrea expulsada desde el púlpito por parte de un pastor que las veía una vez por semana en la escuela dominical.

Abuelas que cuando se volvieron realmente viejas y ya no les alcanzaron las fuerzas para llegar hasta la iglesia con sus propios medios y dejaron de importarle al pastor, recurrieron nuevamente al cuidado de esas que aislaron y de lxs que se avergonzaban repitiendo versículos de una biblia que nisiquiera entendían. Si señores, sus hijxs maricas y travestis. Estos ojos lo han visto en vivo y en directo. Como un pésimo capítulo de la Red. Puro siglo XIX… ajua.

Obviamente es fácil establecer el patrón que los medios prefieren seguir cuando se trata de dar opciones a las personas sexualmente diversas en la televisión. Voces sumisas frente la autoridad de género y político-informativa que solo se preocupa por la capa más superficial de la información -Otra- que en este horizonte de posibilidades tan amplio, es reducida a la vida privada de gente que en muy poco contribuye con la variedad artística presente en el país, que, valga decir, gracias a programas como este, pasó de salsero y vallenatero, a ranchero, reguetonero y popular en un abrir y cerrar de ojos de traqueto paisa.

Mientras tanto, una queda preocupada por la salud mental de nuestras mariquitas y lesbianitas que vienen creciendo en ese universo esquizofrénico que aparentemente, como no puede censurar a las maricas que le embuten los fines de semana por 150 minutos, se las terminan cobrando con las maricas de sus casas… y sus barrios. con la firme esperanza de que algún día el espectro de cuerpos diversos y sus narrativas aparezcan con mayor peso político y simbólico, y no solamente como objetos decorativos de una fauna virulenta y vergonzante de los callejones que no quieren mostrar de sus ciudades fachadas

 

 

Comemierdas.

 

Bibliografía

Ramirez, C. (2008). LA ESTRATÉGIA DE TARGETING UTILIZADA POR CARACOL TELEVISIÓN. cali: UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE OCCIDENTE.

Wikipedia. (s.f.). Perfil la Red. Obtenido de https://es.wikipedia.org/wiki/La_red_(programa_de_entretenimiento)

 

 


Comentarios

  1. Buenos días , gracias por la rica dosis de patacón con quedó y un vaso de chocolisto, aparte el ruido que seguramente le hace al chico egemonico gay blanco con privilegios, la famosa frase ellis ni mi riprisinti

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    1. From Taaaaarget... tu sabes que estos textos son conversaciones conmigo... tu me conoces solo tienes que imaginar que estas en el cuarto de la Maria V una tarde de esas hace unos años.
      Un abrazo grande y caliente con sabor a mandarinazo de la U

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